Eva Guerra Pérez

Nishan Dharma Kaur/Eva
Desde muy joven me sentí atraída por la filosofía oriental. Ya en la universidad con 19 años comencé mis estudios de filosofía y cada asignatura que podía elegir que tuviera relación con Oriente me atraía y la escogía para cursarla. Pero el cine con su mundo mágico apareció en mi vida y me ganó el corazón, así que comencé mi formación en la escuela de cine para volcarme de lleno en el cine y la televisión, a lo que me dediqué durante muchos años. 
Disfruté enormemente viviendo inmersa en el mundo creativo del audiovisual, pero también pude experimentar lo que es vivir diariamente con grandes cargas de estrés y procesos de ansiedad, lo que me llevó a buscar soluciones que me condujeran hacia la calma.
No se cómo, en mi búsqueda de algo que me hiciera sentir bien, probé el yoga. Ésto fue un antes y un después en mi vida, sacudió todo mi ser y comencé a soltar todo aquello que ya no me servía, quedándome con lo imprescindible. 
Comencé a ser feliz viviendo y experimentado el momento presente, mi respiración y aceptando cada instante que vivía tal cual era...dejé de luchar para comenzar a sentir y mi mente dió paso a la calma y la paz. 
Veía como mi cuerpo se iba moldeando sin forzar, sin lastimarme y empecé a tratarme con respeto y amor, cosa que pensé haber hecho toda la vida, pero me di cuenta que tal y como me trataba tenía mas que ver con el ego, con demostrar a los demás como debía ser, que en aceptarme como era realmente. 
Tal fue el flechazo que decidí dejar mi vida tal como la conocía y formarme como profesora para poder compartir lo que sentía, si yo había encontrado una fórmula para ser feliz sentía que mi obligación era compartirla con todo aquel que quisiera experimentar este cambio en su interior. 
El cambio en mi fue un viaje hacia el interior, al corazón de la felicidad, La revolución silenciosa.


Nishan Dharma Kaur/Eva
Desde muy joven me sentí atraída por la filosofía oriental. Ya en la universidad con 19 años comencé mis estudios de filosofía y cada asignatura que podía elegir que tuviera relación con Oriente me atraía y la escogía para cursarla. Pero el cine con su mundo mágico apareció en mi vida y me ganó el corazón, así que comencé mi formación en la escuela de cine para volcarme de lleno en el cine y la televisión, a lo que me dediqué durante muchos años. 
Disfruté enormemente viviendo inmersa en el mundo creativo del audiovisual, pero también pude experimentar lo que es vivir diariamente con grandes cargas de estrés y procesos de ansiedad, lo que me llevó a buscar soluciones que me condujeran hacia la calma.
No se cómo, en mi búsqueda de algo que me hiciera sentir bien,  probé el yoga. Ésto fue un antes y un después en mi vida, sacudió todo mi ser y comencé a soltar todo aquello que ya no me servía, quedándome con lo imprescindible. 
Comencé a ser feliz viviendo y experimentado el momento presente, mi respiración y aceptando cada instante que vivía tal cual era...dejé de luchar para comenzar a sentir y mi mente dió paso a la calma y la paz. 
Veía como mi cuerpo se iba moldeando sin forzar, sin lastimarme y empecé a tratarme con respeto y amor, cosa que pensé haber hecho toda la vida, pero me di cuenta que tal y como me trataba tenía mas que ver con el ego, con demostrar a los demás como debía ser, que en aceptarme como era realmente. 

Tal fue el flechazo que decidí dejar mi vida tal como la conocía y formarme como profesora para poder compartir lo que sentía, si yo había encontrado una fórmula para ser feliz sentía que mi obligación era compartirla con todo aquel que quisiera experimentar este cambio en su interior. 
El cambio en mi fue un viaje hacia el interior, al corazón de la felicidad, La revolución silenciosa.
Nishan Dharma Kaur/Eva
Desde muy joven me sentí atraída por la filosofía oriental. Ya en la universidad con 19 años comencé mis estudios de filosofía y cada asignatura que podía elegir que tuviera relación con Oriente me atraía y la escogía para cursarla. Pero el cine con su mundo mágico apareció en mi vida y me ganó el corazón, así que abandoné mis estudios de filosofía para volcarme en el cine y la televisión, a lo que me dediqué durante muchos años. 
Disfruté enormemente viviendo inmersa en el mundo creativo del audiovisual, pero gracias a este cambio también pude experimentar lo que es vivir diariamente con grandes cargas de estrés y procesos de ansiedad, y buscando soluciones que me condujeran hacia la calma.
No se cómo, en mi búsqueda de algo que me hiciera sentir bien,  probé el yoga, esto fue un antes y un después en mi vida, sacudió todo mi ser y comencé a soltar todo aquello que ya no me servía, quedándome con lo imprescindible. 
Comencé a ser feliz viviendo y experimentado el momento presente, mi respiración y aceptando cada instante que vivía tal cual era...dejé de luchar para comenzar a sentir y mi mente dió paso a la calma y la paz. 
Veía como mi cuerpo se iba moldeando sin forzar, sin lastimarme y empecé a tratarme con respeto y amor, cosa que pensé haber hecho toda la vida, peo me di cuenta que tal y como me trataba tenía mas que ver con el ego, con demostrar a los demás como debía ser, que en aceptarme como era realmente. 
 

Tal fue el flechazo que decidí dejar mi vida tal como la conocía y formarme como profesora para poder compartir lo que sentía, si yo había encontrado una fórmula para ser feliz sentía que mi obligación era compartirla con todo aquel que quisiera experimentar este cambio en su interior, realizar el viaje al corazón de su felicidad, o como me gusta definirlo hacia la revolución silenciosa.


El cambio en mi fue un viaje hacia el interior, 
al corazón de la felicidad. 
La revolución silenciosa.

Me fuí a India a la escuela más antigua del planeta, con la intención de ir primero hacia la esencia de la práctica con Ashtanga clásico en The Yoga Institute en Bombay junto a Ms Hansaji y Dr. Jayadeva Yogendra.
 Continué formándome después en otros estilos en España, en Ashtanga Vinyasa clásico y progresivo con Ricardo Ferrer en el Instituto Europeo del Yoga, Power Vinyasa con Jorge Cabellos en YES, en Hatha Yoga con Mayte Criado y Yoga en la Educación con Joaquin Castaño en la Escuela Internacional de Yoga y Yoga para el Embarazo y Postparto y Yoga en Madre Tierra. 
He podido asistir a workshops con Mark Wthiwell, alumno directo de Krishnamacharya y T.K.V. Desicachar, sobre la gran tradición del yoga, y con Ronald Siegel, profesor de Psycohology en Harvard Medical School, sobre Mindfulness.
Me encanta aprender de otras miradas y de mi propia práctica para seguir compartiendo con quienes se acercan a practicar conmigo. 
Aprendiendo de cada ser y honrando a mis maestros, 
Namasté.